Sistema de Agua Potable para Nueva Jerusalén
En el corazón del municipio de Poptún, en el departamento de Petén, se encuentra la comunidad de Nueva Jerusalén. Una comunidad que, hasta hace poco, enfrentaba desafíos significativos relacionados con el acceso a agua potable, saneamiento e higiene. Sin embargo, gracias a la implementación de un proyecto integral por parte Hábitat para la Humanidad Guatemala, las vidas de 32 familias han experimentado un cambio transformador.
Un Vistazo a la Comunidad de Nueva Jerusalén
Antes del proyecto, las 32 familias de Nueva Jerusalén vivían en condiciones de pobreza y pobreza extrema. Sus viviendas estaban construidas principalmente con materiales como madera y láminas, y muchas de ellas carecían de acceso completo o parcial a servicios básicos de agua, higiene y saneamiento.
Selección de Familias Beneficiarias
La selección de las familias beneficiarias se llevó a cabo con el apoyo del equipo técnico de HPHG y los Consejos Comunitarios de Desarrollo Urbano y Rural (COCODEs). Se identificaron a las familias que más necesitaban el apoyo, asegurando que cumplieran con los criterios de selección de la fundación. Esto garantizó que los recursos se dirigieran a quienes realmente los necesitaban.
Implementación del Proyecto
La implementación del proyecto involucró a las mismas familias beneficiarias en diversas etapas. Los adultos participaron en tareas constructivas, como el transporte de materiales y el apoyo a los albañiles. Además, se promovieron actividades de desarrollo de capacidades para fomentar cambios positivos en temas de salud, higiene, ahorro y gestión de riesgos.
Resultados Impactantes
El proyecto logró proporcionar soluciones habitacionales que promovieron el acceso a agua, higiene y saneamiento para estas familias. Como resultado:
- Las 32 familias ahora cuentan con sistemas de recolección de agua de lluvia, filtros purificadores de agua, pilas y repuestos de candela del sistema filtrante.
- Se construyeron 5 sistemas comunitarios de recolección de agua de lluvia para ampliar el acceso al recurso hídrico de la comunidad.
- Las familias adquirieron conocimientos y herramientas de autogestión en temas de salud, higiene, ahorro y gestión de riesgos.
Estrategias Clave
Durante la ejecución del proyecto, se emplearon diversas estrategias, incluyendo:
- Elaboración de un plan de acción y cronograma con fechas establecidas.
- Identificación y selección de familias con la participación de líderes comunitarios.
- Reuniones con líderes comunitarios y familias beneficiarias para establecer compromisos.
- Visitas de supervisión del proceso constructivo por el personal técnico.
- Implementación de actividades de desarrollo de capacidades.
- Participación activa de los miembros de la comunidad en diversas tareas.
Lecciones Aprendidas
El proyecto reveló valiosas lecciones, incluyendo:
- La importancia del compromiso de la comunidad en el éxito del proyecto.
- La necesidad de gestionar adecuadamente los materiales con los proveedores.
- Considerar factores climatológicos en la planificación de actividades.
Impacto en la Comunidad
La implementación del proyecto ha tenido un impacto significativo en la comunidad:
- Menos enfermedades gastrointestinales debido al acceso a agua apta para el consumo.
- Menos tiempo dedicado a la recolección de agua, lo que permite a las familias enfocarse en otras actividades.
- Mayor conocimiento en prácticas de higiene y gestión de riesgos.
- Aumento en la cantidad y calidad de agua disponible en los hogares.
Sostenibilidad
El proyecto promueve la sostenibilidad a través de la capacitación y empoderamiento de la comunidad. Las familias pueden autogestionar nuevos proyectos y abordar sus necesidades identificadas. Además, se fomenta la educación financiera para mejorar la gestión económica familiar.
Apoyo de Autoridades y el Sector Privado
El proyecto recibió apoyo de las autoridades locales, los COCODEs, y el sector privado, en particular, Aliaxis by Durman, que donó materiales esenciales para la implementación del proyecto.
El proyecto de Agua Potable en Nueva Jerusalén es un ejemplo inspirador de cómo una fundación comprometida puede cambiar vidas y comunidades enteras. Gracias a esta iniciativa, 32 familias ahora disfrutan de un acceso mejorado a agua, higiene y saneamiento, lo que ha tenido un impacto positivo en sus vidas diarias y en su futuro. Este proyecto no solo ha brindado soluciones concretas, sino que también ha sembrado las semillas de la autogestión y el desarrollo sostenible en la comunidad de Nueva Jerusalén.