Mejorando la salud a través de la vivienda digna

Ángela Pirir Cuc (26) es madre soltera de tres hijos: Selvin Adolfo (10), Lesly Paola (7) y Gerber (5). Viven en una pequeña casa en la comunidad de Santa Marta, Sumpango, en el departamento de Chimaltenango.  

Ángela se ocupa de sus hijos y de las tareas del hogar. Además, trabaja como jornalera en el campo. Sus dos hijos mayores van a la escuela pública local. Están en tercero y primero de primaria.   

Al compartir su historia familiar, Ángela comenta que Gerber ha pasado por varias fases médicas en su corta vida. Empezó a tener convulsiones de bebé y le diagnosticaron epilepsia. Más tarde, al seguir perdiendo peso y presentar otros síntomas, le diagnosticaron una enfermedad renal. Comenzó entonces su tratamiento de diálisis en el Hospital Nacional Roosevelt, en Ciudad de Guatemala. Además, a Gerber se le han diagnosticado varias enfermedades, entre ellas parálisis y síndrome de Down.   

Como la familia no tenía una habitación segura para que Gerber recibiera su tratamiento de diálisis, el municipio les proporcionó una. Actualmente, la familia sigue teniendo que viajar a la ciudad para el seguimiento médico de Gerber.  

Con el apoyo de Fundanier y Bridge of Life, Gerber puede ahora recibir diálisis en casa. La sala de diálisis peritoneal está construida con bloques de hormigón, madera, suelo de cerámica, paneles solares y los accesorios necesarios y adecuados para realizar la diálisis de Gerber en un espacio libre de bacterias.   

Ángela comparte: «Ahora estamos mucho mejor. El espacio es más adecuado y seguro. Antes, tenía que calentar las bolsas que necesitaba, con agua caliente o con la luz del sol. Ahora tengo el equipo y el espacio adecuados, y puedo ahorrar tiempo para cuidar de Gerber». A la familia le gusta cómo ha quedado la nueva habitación, con el suelo nuevo y con los adornos que les han hecho los voluntarios. «Me apoyan proporcionándome material de higiene, y mi hermana también me ayuda todos los días con Gerber, preparándole la comida y haciéndole la diálisis, sobre todo cuando tengo que trabajar. Somos muy afortunados», añade Angela.  

A Angela le gustaría compartir el siguiente mensaje con los voluntarios y donantes: «Gracias a Dios por ponerlos en mi camino. Que Dios les bendiga por este esfuerzo que nadie más hace por nosotros. Cada día rezo para que estén bien y puedan ayudar a más personas como nosotros. Muchas gracias».  

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Diana Reyes

Coordinadora de Comunicaciones

Hábitat para la Humanidad Guatemala

DReyes@habitatguate.org